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Comparativa de Consumo: Ford Escort 1.1 L/Talbot Horizon LS/Citroën Visa II Super E/Renault 5 GTL/Seat Panda 45
Poderosas razones de tipo económico impulsan a los fabricantes de automóviles a construir éstos según técnicas exquisitas para conseguir consumos cada vez más reducidos. Nos hemos enfrentado hoy a un tipo de prueba poco usual; poco usual por lo que tiene de exhaustivo, en busca del automóvil más económico en combustible del mercado nacional.
EL GRAN PREMIO DEL CONSUMO, como hemos querido denominar esta prueba comparativa, reúne a los Talbot Horizon LS, Ford Escort 1.1 -L, Citroën Visa II Super E, Renault 5-GTL/5 p. y Seat Panda 45. Son modelos sobradamente conocidos por nuestros lectores, aunque posiblemente hay un montón de valiosos datos que se escapan a sus posibilidades de análisis; sin ir más lejos, sus respectivos valores de consumo en las más variadas condiciones de funcionamiento, a lo largo de distintos tipos de trazado, en toda su gama normal de velocidades de uso... En estas averiguaciones consiste nuestro GRAN PREMIO.
Ford Escort 1.1-L. Motor de 1.117 c. c.. con relación de compresión de 9,5 a 1 (gasolina super) y caja de cuatro velocidades. 59 CV. Carrocería de 4 metros. Peso en vacio de 835 kg. Carburador Ford de vénturi variable.
Talbot Horiion LS. Motor do 1.294 c. c., con relación de compreaión da 8£ a 1 (gasolina normal) y caja de cuatro velocidades. 59 CV. Carrocería de 3,96 metros. Peso en vacio de 950 kg. Carburador Soles 32 BISA invertido.
Citroën Visa II Super E. Motor 1.124 c.c., con relación de compresión de 9,2 a 1 (gasolina super) y caja de cuatro velocidades. 50 CV. Carrocería de 3,69 metros. Peso en vacío 810 kgr. Carburador Solex 32 PBISA 11/278 invertido.
Renault 5-GTL. Motor de 1.108 c. c., con relación de compresión de 9,5 a 1 (gasolina super) y caja de cuatro velocidades. 45 CV. Carrocería de 3,50 metros. Peso en vacio de 785 kg. Carburador Zenith 32 IF-7 invertido.
Seat Panda 45. Motor de 903 c. c., con relación de compresión de 9 a 1 (gasolina super) y caja de cuatro velocidades. 45 CV. Carrocería de 3,38 metros. Peso en vacio de 680 kg. Carburador Bressel-Weber ICEV 35/250 invertido.
Un solo automóvil, de entre los cinco que para la prueba hemos elegido, será el “campeón" en la batalla del consumo, competición que nosotros hemos reflejado aquí como si de una carrera automovilística se tratara y que, en realidad, habla con precisión absoluta de los logros obtenidos por los fabricantes.
Las carrocerías, con una común tendencia progresiva hacia el concepto de los "dos volúmenes", obedecen a diseños distintos y arrojan, por tanto, distintos coeficientes de penetración aerodinámica; los motores tienen también distintas cilindradas, los neumáticos equipados en origen poseen medidas y calidades de goma dispares, etc. Todos los factores corresponden exclusivamente a cada modelo, a pesar de lo cual nosotros hemos unificado en lo posible los valores “neutrales” a lo largo del "test": así, los recorridos y condiciones de carga han sido idénticos para los cinco modelos, los coches han sido conducidos por la misma persona; los neumáticos, hinchados exactamente, según las especificaciones del fabricante; las condiciones atmosféricas, idénticas; etc. Todo listo, pues, para determinar cuál de estos cinco populares vehículos es campeón en consumo. Un dato muy valioso con vistas a 1982.
Todos los fabricantes españoles tienen en venta algún modelo de tipo económico, en el que no importan tanto las prestaciones velocísticas como el consumo de combustible. Este es cada vez más bajo y se complementa con un buen conjunto de ventajas de habitabilidad, agilidad de manejo, buena apariencia, mecánica sin complicaciones, etcétera. Hoy nos enfrentamos a cinco modelos sobradamente conocidos de todos, como son los Seat Panda, Citroën Visa, Renault 5, Ford Escort y Talbot Horizon, todos ellos en su versión más económica, llegando incluso a la utilización de gasolina de 90 octanos (Horizon LS).
¿Por qué estos modelos y no otros? La pregunta no debe tener respuesta en el caso de los Horizon, Visa y R-5, pues son, sin duda, los coches de su categoría de menor consumo; en cuanto a los Seat Panda y Ford Escort, cabría objetar la conveniencia de incluir en su lugar los Fura y Fiesta. Hemos desistido, sin embargo, en este sentido, habida cuenta de algunas consideraciones que pudieran parecer marginales y que en realidad no lo son.
En el caso de Ford, hemos encontrado en el Escort el atractivo de la nueva carrocería adoptada para el motor “Valencia”, de 1.117 c. c., presente también en el Fiesta L. A la novedad que para el lector pueda suponer la apariencia y el comportamiento del Escort español, hemos añadido por nuestra cuenta el interés por la resolución de un reto importante: cómo iba a comportarse el motor 1.1 en una carrocería de cuatro metros, con cinco puertas, buenas prestaciones y capacidad para cinco personas.
Los modelos más económicos de cada marca se ven enfrentados a continuación en una prueba específica de consumo; todo lo exhaustiva que el tiempo y las circunstancias nos permiten, todo lo objetiva que nos ha resultado posible. Pese al criterio “económico” monocolor de nuestra prueba, no hemos despreciado valores objetivos de otra índole, e incluso valores subjetivos, en relación con las prestaciones de cada coche. Cada circunstancia puede dar diversas oportunidades al modelo de cada marca, de modo que un consumo ligeramente más alto pueda verse compensado con unas prestaciones también superiores; esto, desde luego, suma puntos a favor de los vehículos más homogéneos.
Veamos, entonces, cuáles son los rendimientos sobre el papel de estos cinco vehículos económicos del mercado español. El Horizon LS, con sus 1.294 c. c. y su compresión de 8,8 a 1 (para usar gasolina normal); el R-5 GTL 5 Puertas, con su motor de 1.108 c. c. y relación de compresión de 9,5 a 1; el Visa II Super E, con su motor de 1.124 c. c. y relación de compresión de 9,2 a 1; el Escort 1.1 L, con su motor “Valencia” de 1.117 c. c. y compresión de 9 a 1; finalmente, el Panda, con motor de 903 c. c. y relación de compresión de 9 a 1, claramente el benjamín de esta comparación y que, sin duda, tiene por delante una dura prueba, por ser el único que baja del litro de cilindrada.
Por lo demás, una mecánica actual y fiable, con transmisiones a base de tracción delantera y cajas de cuatro velocidades, suspensiones independientes a las cuatro ruedas (a excepción del Panda, con puente rígido trasero sobre ballestas).
Se trata de modelos bien equipados, aun encontrándose en la parte baja de sus respectivas gamas. Como tales vehículos económicos, dos de ellos vienen dotados de un sistema para orientar al conductor sobre la marcha acerca de lo que se va gastando; el Visa recurre a un doble indicador luminoso de enorme eficacia, mientras que el R-5 incorpora unas simples menciones orientativas de velocidades óptimas sobre la esfera del velocímetro. Los demás no cuentan con este dispositivo ni ningún otro similar, detalle que se echa de menos particularmente en el Horizon LS, habida cuenta de que su hermano, el GL de alta compresión, lleva un econoscopio luminoso francamente fiable.
CONCLUSION: TODOS POR DEBAJO DE LOS 8 LITROS
Los distintos tipos de pruebas realizadas nos permitieron establecer unos valores de consumo medio, realmente poco útiles si se va a dar una utilización específica al automóvil (ciudad al 80 por ciento, viajes largos, etc.) y por lo tanto se va a buscar el coche más económico en un terreno concreto; pero desde luego, estos consumos medios hablan de forma clara sobre la personalidad ahorradora de los cinco vehículos probados.
El R-5 GTL se adelantó en la primera clasificación, seguido a escasa distancia por el Escort y el Visa. Algo más atrás, el Horizon y el Panda. Cuando trasladamos los valores de consumo medio y kilómetros por litro de combustible a valores más específicos de pesetas por kilómetro, podemos llegar a esperar el repentino liderazgo del Horizon, dada su escasa diferencia en consumo medio con respecto a los mejores valores y dada también la diferencia de precio en los combustibles (3 pesetas por litro). Sin embargo, los R-5, Escort y Visa siguen conservando sus puestos en la tabla “económica”, aunque el Horizon se aproxima a ellos de forma significativa; atención, pues, a este detalle, pues las superiores prestaciones del modelo de Talbot hacen de él un modelo muy apetecible por estos conceptos complementarios.
Y llega la etapa final, en la que enfrentamos valores porcentuales de consumo y valores porcentuales (y globales) de prestaciones. Cambian por completo las tornas y es el Visa II Super E el mejor de todos, seguido a un 0,37 por 100 por el Horizon, a un 1,32 por 100 por el Escort, a un 2,68 por 100 por el R-5 y a un 7,47 por 100 por el Panda. Para llegar a estas conclusiones, hemos abordado la comparación con un criterio netamente aritmético, ya que cualquier valoración de otro tipo sería por completo subjetiva y por ello escasamente acorde con el espíritu de esta prueba comparativa; así pues, hemos analizado para ello en qué proporción un coche es más rápido y ágil que otro y en qué medida sus cifras de consumo se ponen en relación con este carácter.
Digamos, pues, que es el Renault 5 GTL (5 puertas) nuestro “campeón” del consumo, un coche con una autonomía media de 564 kilómetros, un precio por kilómetro de 5,15 pesetas, un consumo medio de 7,26 litros cada 100 kilómetros y capaz de recorrer 13,77 kilómetros con un litro de gasolina súper. Su maletero admite 270 litros de equipajes cuando todas las plazas están ocupadas y 900 con el asiento trasero abatido; las cotas interiores son más que suficientes para viajar cuatro personas cómodamente. En este sentido, es el Horizon el vehículo más capaz de los cinco, con una amplitud interior destacable y 480/1.200 litros de volumen para equipajes; le siguen el Escort, con generosos espacios interiores y 360/755 litros para equipajes, el propio R-5, el Visa (280/674 litros) y, por fin, el Panda, muy espacioso para personas y equipajes (272/1.088 litros), pero el interior menos cómodo que sus rivales. Terminemos hablando de precios, ya que de hacer economías estamos hablando. El Panda, con gran diferencia, sigue siendo un vehículo más barato en adquisición que el resto, con 476.142 pesetas de precio final (contado), contra 577.392 del R-5, 595.870 del Visa, 656.722 del Horizon y 724.896 del Escort. Analizando todos los factores en juego, al usuario toca decidir. Sin embargo, creemos que la conclusión a este trabajo debemos sacarla de los valores de consumo medio de todos los coches probados. Y ciertamente, creemos que es un éxito el que todos ellos estén por debajo de los ocho litros. El usuario español puede disponer de coches auténticamente económicos.
CONSUMOS DE CATALOGO
AUTONOMIA
La autonomía media está basada en los resultados de nuestras distintas pruebas.
VALORES DE CONSUMO EN AUTOPISTA, A VELOCIDADES CONSTANTES
* Valores expresados en litros cada 100 km., medidos con dos personas a bordo, 20 kilos de material de pruebas y depósito lleno.
VALORES DE CONSUMO EN CARRETERA REDIA
VALORES DE CONSUMO EN CARRETERA DE MONTANA (conducción normal)*
* Valores expresados en litros/100km., registrados en un circuito de montaña, bajo conducción normal de tipo económico, con dos personas a bordo, 20 kilos de material de prueba y depósito lleno.
PRESTACIONES DINAMICAS
* El R-5 es superior al Panda en aceleración (0,92 por 100), mient ras el Panda es superior a aquél en velocidad máxima (0,82 por 100).
CONSUMO MEDIO
RELACION PRESTACIONES/CONSUMO
· Fuente: J. S. (VELOCIDAD nº 1059, 26 de diciembre de 1981)
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