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Seat 600 D Gabor
El que algo quiere, algo le cuesta, reza el refrán, y en este caso no ha podido dejarse de cumplir. Los creadores del automóvil, señores Borrás y Golobart, ya nos presentaron la primera unidad del mismo en el pasado Sector del Auto móvil, pero sobre aquél se han ido sucediendo una serie de modificaciones, y hasta la fecha el coche no había quedado listo definitivamente. Ahora ya hay, aparte de éste, dos vehículos más que están en poder de Juncosa para realizar las transformaciones de motor solicitadas por los clientes. Aparte de éstos, ya se cuenta con un “stock” de piezas para poder montar pequeñas series de vehículos que VELOCIDAD ha sometido a prueba para sus lectores.
EL VEHICULO
Se trata de una modificación integral sobre la mecánica del Seat 600-D, del que solamente se aprovecha la parte inferior del casco, si bien la Seat ya lo entrega sin carrocería, con una ligera rebaja sobre el precio total del coche, para poder trabajar sobre el mismo. Es importante que a pesar de ello toda la mecánica mantiene la garantía de fábrica, mientras que en la parte carrocería la garantía la ofrece Gabor. La carrocería es de un cupé dos plazas, con un profilaje de líneas muy bien estudiado, y en el que las medidas exteriores se mantienen casi iguales al modelo original, aumentando solamente unos centímetros en su longitud total.
CARROCERIA
Está realizada totalmente en poliéster, que si bien no aligera el peso del coche, que se mantiene sobre los 600 kilogramos, mismo peso que el 600-D, le da una resistencia mucho mayor, siendo posible golpearla a martillazos sin que aparezca la menor abolladura o signo de debilidad.
Las puertas se abren en sentido inverso a la marcha, que es el correcto, y los cristales de la parte superior se pueden quitar muy fácilmente, quedando el coche descapotable en muy pocos segundos.
La parte delantera está muy lograda, consiguiendo una magnífica penetración al aire, y en la trasera se ha tenido que sacrificar un poco la esbeltez del vehículo en bien de su profilaje, ya que de esta forma el aire no encuentra casi resistencia después de haber superado el vehículo.
La superficie de visibilidad es muy grande, con 6.898 cm2 en la parte posterior y 6.508 en la anterior. Si añadimos todos los restantes cristales, posee en total 17.478,57 cm2 de visibilidad, cantidad nada despreciable y no igualada por muchos vehículos sport existentes en el mercado. Los limpiaparabrisas son también de diseño especial y abarcan una superficie muy grande de barrido, con 395,2 cm2. En este sentido encontramos a faltar los surtidores de agua para el limpiaparabrisas, pero parece que los nuevos vehículos ya vendrán equipados con él.
TODOS LOS DETALLES HAN SIDO CUIDADOS
Dado que sobre este vehículo el cliente puede transformar su motor cuando crea conveniente, y por las características del mismo parece que la mayoría llevan esta idea, todo el cofre delantero se ha invertido, como el depósito de gasolina, para equilibrar la autonomía del coche, que entonces consumiría más de lo normal en un motor de serie.
La batería queda escondida debajo del tapizado, que es de muy buena factura, y se puede trabajar en ella sacando solamente dos tomillos. El desconectador de la misma va situado detrás, aprovechando el hueco que deja la parte central de la llanta.
Las reparaciones de carrocería no tienen problemas, ya que su porcentaje es mucho menor, dada la superior resistencia de la misma, pero pueden ser realizadas por cualquier persona que conozca el trabajo del poliéster.
"VELOCIDAD” PRUEBA Y OPINA
Una vez solucionados todos los problemas que han ido surgiendo con el vehículo, hemos solicitado del fabricante uno de estos vehículos para someterlo a prueba y examinarlo detenidamente, y éste ha sido puesto a nuestra disposición con toda clase de facilidades, por lo que se ha podido hacer un estudio exhaustivo del mismo.
Confort .—Lo primero que se siente al entrar en el coche es una sensación de dificultad para entrar y salir, propia de un vehículo de este tipo, pero que una vez dentro queda sobradamente compensada con la comodidad de los asientos, que son del tipo envolvente y reclinables, pudiendo tomar cuatro posiciones distintas. La parte superior es de diseño totalmente distinto a lo visto hasta ahora, y sirve de apoyacabezas incluso para el conductor, que puede pilotar con la cabeza apoya da sin ningún esfuerzo.
Conducción ciudadana . — A pesar de ser un vehículo bastante bajo y con una posición de conducción deportiva, la conducción por ciudad no se hace engorrosa, debido a su magnífica visibilidad. Incluso las maniobras de aparcamiento han sido pensadas, y para ello se le ha dotado de dos pequeños cristales triangulares, justo detrás de los asientos, que reducen en mucho el ángulo muerto originado por los laterales traseros. El cuadro de instrumentos, que es completísimo, se divisa perfectamente y lleva una serie de lámparas piloto que facilitan mucho la observación del estado de marcha.
La rueda de recambio se extrae por el capó trasero, que a pesar de sus grandes dimensiones y peso no ocasiona ruidos. Unicamente es reprochable la desproporción que existe entre el espejo retrovisor y la luneta trasera, ya que éste resulta algo pequeño para aquélla, y además el sistema de fijación debe ser mejorado, ya que vibra un poco y todo lo que se ve a través de él resulta borroso.
Prueba en carretera . — Dejando aparte la estabilidad del coche, de la que trataremos en párrafo posterior, vuelve a destacar el acabado del vehículo; no aparecen ruidos, ya que está muy bien ajustado de carrocería; ni se oye el silbar del viento, porque el vehículo es totalmente estanco al agua y al aire, siendo asimismo muy poco sensible al tiento lateral.
Va provisto de muy buena luz, gracias al doble faro delantero, y en la parte inferior de la carrocería, debajo del parachoques, va equipado con dos faros antiniebla, protegidos de las piedras por dos coberturas de plástico transparente.
El consumo, con el motor de serie, es ligeramente inferior al del 600-D, del que procede la transformación, debido a su menor resistencia, si bien en la marcha por ciudad esta diferencia se convierte en inapreciable.
Un juego de neumáticos Dunlop SP ayuda mucho a la estabilidad en carretera de un vehículo, pero desde luego no son el todo, ya que si éste falla en origen no hay neumáticos que valgan. Precisamente estos neumáticos son las que equipan al Seat Gabor, y hacen resaltar todavía más la magnífica adherencia del coche a la carretera.
Su conducción no presenta problemas, ya que se puede entrar en las curvas de cualquier forma sin que aparezcan extraños. Al ser un vehículo con muy poca altura total, ya se adquiere sensación de seguridad en el momento de introducirse en él, que posteriormente se ve refrendada con positivas realidades.
Y fue un acontecimiento inesperado el que nos ofreció la mejor prueba de la estabilidad y reacciones nobles de este coche. Cuando circulábamos a buena marcha por la carretera que conduce desde San Cugat a Barcelona, lugar donde anualmente se celebra una subida en cuesta, un fallo de fabricación de la llanta posterior izquierda hizo que esta rueda se desprendiera del vehículo en el momento de iniciar la curva, obligándonos a tomar la curva y la recta que le seguía sobre tres ruedas. El coche se deslizó de un lado a otro de la carretera, pero fue hábilmente dominable por medio de contravolante. Como la carrocería resistió a la perfección el impacto a que se le sometió, el coche quedó bastante equilibrado, facilitando en mucho la maniobra y dando una magnífica prueba de su estabilidad y resistencia.
ATENCION A LAS LLANTAS AGUJEREADAS, MUCHAS DE ELLAS SON DE SEGUNDA MANO
Y a propósito de lo ocurrido vale la pena dedicar unas líneas a este tipo de accesorio, que se comercializó en tomo al Seat 600. Todo cliente que tiene un Seat 600 y quiere cambiar sus llantas por otras más bonitas, del tipo "agujereado", puede hacerlo por un precio módico, entregando las suyas, que posteriormente servirán para otro cliente. Esto facilita mucho la venta, ya que resulta mucho menos costoso el cambio y además no quedan estorbos, como sería un juego de llantas en casa; pero es peligroso, ya que las llantas que montan no se sabe las penalidades que hayan podido sufrir ni los años que llevan en circulación, ya que exteriormente parecen nuevas. A raíz de esto, a partir de ahora el Seat-Gabor se entregará con las ruedas originales, y que cada uno monte lo que le parezca más conveniente, ya que el prestigio de un fabricante de automóviles no puede estar expuesto a anomalías de este tipo.
CONCLUSION
En suma, el Gabor es un vehículo que nos ha satisfecho mucho en todos sus aspectos, y en él aparecen solamente pequeños detalles dignos de transformación, que ya han sido citados, y que como el plazo de entrega del coche es de unos dos meses, a buen seguro, todos los posibles clientes los encontrarán ya solucionados.
El precio resulta algo elevado, ya que 150.000 pesetas por un coche nuevo ó 90.000 para adoptar la carrocería en el vehículo del cliente no están al alcance de todos para invertirlas en una mecánica de Seat 600, pero desde luego el placer de disfrutar de un cupé del que no habrá grandes cantidades en el mercado, es preciso pagarlo.
· Texto: Forcano&Crous (VELOCIDAD n º 277 - 31 de diciembre de 1966)
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