Alfa Romeo 75 2.0

VIRTUDES
· PRESTACIONES
· DESARROLLOS DEL CAMBIO
· COMPORTAMIENTO
· DIRECCION
DEFECTOS
· BALANCEO DE LA CARROCERIA
· VIBRACIONES DEL MOTOR
· SENSIBLE AL VIENTO LATERAL
· AUTONOMIA ESCASA
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Alfa Romeo ha sido siempre una fábrica marcada por lo deportivo, pero, en sus últimos modelos, parecía que este aspecto había quedado en un segundo término. El 75, su último modelo, vuelve a las andadas, y se le puede calificar, sin lugar a dudas, como un deportivo familiar, ya que, aunque su aspecto exterior es el de una berlina de categoría media-alta, sus prestaciones y comportamiento son de deportivo.
En general, la base del coche deriva del desaparecido Giulietta, conservando la misma batalla y también la misma disposición mecánica, motor delantero y caja de cambio en el eje trasero. En cambio, en lo puramente estético, la transformación ha sido total, y la línea del 75 es del mismo estilo que la de su hermano mayor el 90. Su estética es polémica, ya que sus líneas no siguen las tendencias actuales de coches redondeados, en los que se ha concedido todo en favor de un buen coeficiente de penetración aerodinámico. En el 75, el Cx es de 0,37 que, a pesar de no ser maravilloso, permite una velocidad máxima por encima de los 190 kilómetros por hora.

Otro aspecto, en el que también ha cambiado el 75 con respecto a sus predecesores, es la calidad de acabado. En este modelo se ha materializado el enorme esfuerzo de Alfa Romeo por mejorar el deficiente acabado de sus modelos. Durante los aproximadamente 1500 kilómetros de prueba que hemos realizado con el 75, no hemos notado ninguna pega en este apartado, al que hay que calificar como bueno, ya que, además de tener una presencia atractiva, resulta resistente y funcional.
El tipo de conductor que encaja con el carácter del 75 es el conductor romántico que disfruta conduciendo y sintiendo las reacciones del coche, y para el cual el sonido que emite el motor es una melodía.
MECANICA ****
En el 75 se ha adoptado la misma disposición mecánica del Giulietta. Un motor de cuatro cilindros en línea, dispuesto longitudinalmente, con el grupo caja de cambio-diferencial montado sobre el eje trasero, con lo que se consigue un reparto de pesos ideal entre los dos ejes.
El motor cubica casi dos litros y desarrolla una potencia de 128 caballos, que permiten unas prestaciones de primer orden. La alimentación está encomendada a dos carburadores de doble cuerpo, solución que, aunque no es ideal a la hora de conseguir consumos bajos, lo cierto es que funciona muy bien cuando se trata de exprimir a fondo toda la caballería. El problema de este motor son las fuertes vibraciones que emite, que, particularmente al ralentí, algunas veces llegan a ser similares a las de un motor diésel.

A pesar de que el par máximo lo desarrolla a un régimen bastante elevado, no resulta perezoso a bajas revoluciones, y a la más mínima solicitud del acelerador, sube de vueltas con alegría. También hay que decir que las relaciones de cambio están perfectamente adecuadas al carácter del motor y permiten realizar una conducción deportiva. En quinta se puede alcanzar el régimen máximo del motor en condiciones normales, y en condiciones favorables es posible incluso superarlo, por lo que en las largas bajadas en autopista circulando a tope hay que echar de vez en cuando una ojeada al cuentavueltas.
Un punto que nos sorprendió agradablemente es que por fin se ha suprimido el desagradable rascado de la primera velocidad, mal endémico de todos los Alfa Romeo con este tipo de disposición de caja de cambio. Incluso cambiando de marcha muy rápidamente, no se siente el más mínimo rascado.
Los frenos son de disco a las cuatro ruedas y su funcionamiento es impecable tanto por potencia como por progresividad. La dirección es asistida, y tiene una desmultiplicación adecuada, tanto para circular rápido por carretera, como para callejear por ciudad.
También es clásico de Alfa el sistema de suspensión empleado en el 75, independiente con guías verticales en el eje delantero, y con puente de Dion detrás. Esta disposición es muy eficaz y permite aprovechar muy bien el gran potencial del vehículo.
En lo que se refiere a consumos, el alfa es tan solo discreto. En conducción pacífica se obtienen cifras razonables, pero, cuando se desatan las ansias de correr y se deja libre el pie derecho, las cifras suben muy por encima de los 10 litros a los 100.
Conduciendo más o menos deportivamente por carretera con muchas curvas, es fácil aproximarse a los 15 litros, pero, aunque sea tan solo por la satisfacción que produce la conducción de este coche en estas circunstancias, estamos seguros que el precio merece la pena.
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) |
194,2. |
Aceleración (seg.) |
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400 m. salida parada |
17,1. |
1000 m. salida parada |
31,7. |
De 0 a 100 km/h |
9,8. |
Recuperación (seg.) |
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400 m. desde 40 km/h en 4ª |
18,1. |
400 m. desde 40 km/h en 5ª |
19,8. |
1000 m. desde 40 km/h en 4ª |
33,5. |
1000 m. desde 40 km/h en 5ª |
36,9. |
De 80 a 120 km/h en 4ª |
9,2. |
De 80 a 120 km/h en 5ª |
12,3. |
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CONSUMO (litros /100 km)
Ciudad
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A 24,6 km/h de promedio |
12,7. |
Carretera |
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A 90 km/h de crucero |
7,4. |
En conducción rápida |
14,8. |
Autopista |
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A 120 km/h de crucero |
8,7. |
A 140 km/h de crucero |
11,5. |
A 180 km/h de crucero |
15,2. |
Consumo medio ponderado |
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Litros/100 km |
10,7. |
Autonomía media |
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Kilómetros recorridos |
410. |
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FRENOS
Distancias de frenado (en metros)
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A 60 km/h |
14,6. |
A 100 km/h |
36,1. |
A 120 km/h |
55. |
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COMPORTAMIENTO ****
En carretera, las tendencias del Alfa 75 son totalmente neutras; es decir, no hay ninguna tendencia dominante ni del eje delantero ni del trasero. Por donde van las ruedas delanteras pasa el resto del coche. Tan solo en curvas apuradas, tomadas muy forzado, el 75 saca a relucir su condición de tracción trasera, tirando de atrás de forma progresiva y fácilmente corregible a base de acelerador y volante.
El mayor encanto que se ha conseguido con este modelo es que el conductor vive todas las reacciones del coche y disfruta controlándolas. Por el contrario, el mayor inconveniente son las fuertes inclinaciones que adquiere la carrocería en las curvas, concesión que se ha dado al confort, dado que se trata de un coche familiar. En autopista, el comportamiento no ofrece ningún tipo de problemas se circule a la velocidad que se circule. En carretera incita hacer diabluras, ya que las buenas posibilidades del motor y la agilidad de la dirección lo permiten. Cuando se toma una curva cerca del límite, sorprende el balanceo de la carrocería, pero, a pesar de la inclinación, las ruedas siguen en su trayectoria, y particularmente las traseras permanecen totalmente perpendiculares al suelo, con lo cual se aprovecha totalmente la capacidad de agarre de los neumáticos.

La única pega que encontramos respecto al comportamiento es la sensibilidad al viento cruzado, que obliga a corregir continuamente la trayectoria con el volante.
La notable mejora del manejo de la caja de cambio también ayuda a un mejor aprovechamiento del motor, ya que los cambios son ahora rápidos y precisos y las pérdidas de tiempo son mínimas, aunque el recorrido de la palanca sigue siendo algo largo.
Los frenos tienen un buen tacto y es fácil dosificar las frenadas hasta el punto necesario. La resistencia a la fatiga es también notable.
La posición de conducción es buena y se conjugan para ello la comodidad del asiento y las posibilidades de reglaje del volante, que puede variar tanto su altura como su distancia al conductor, con lo cual casi cualquier persona encontrará su posición idónea.
La visibilidad es buena hacia delante y hacia los lados; en cambio hacia atrás no se ve dónde acaba el coche, y en las maniobras de aparcamiento hay que ir con mucho cuidado para no dar al de atrás. La iluminación también cumple, y se puede circular a buena velocidad por la noche, ya que las luces largas además de profundidad tienen una buena amplitud. El coche tiene lavafaros para evitar que las salpicaduras reduzcan la luminosidad.

Uno de los puntos más difíciles de evaluar en este coche es el ruido. Evidentemente, el Alfa 75 es un coche ruidoso en comparación con otras berlinas de su categoría, pero lo cierto es que para un apasionado de la conducción el sonido grave y redondo de este motor le transportará a un ambiente de carreras y no le resultará molesto en absoluto. Eso sí para el que vea en el Alfa simplemente un medio de transporte, este sonido le molestará, y particularmente a lata velocidad se le hará insoportable.
SONORIDAD
Al ralentí
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53,4. |
A 60 km/h |
67,1. |
A 90 km/h |
70,6. |
A 120 km/h |
74,2. |
A 140 km/h |
76,7. |
A tope |
82,2. |
(Mediciones efectuadas en las plazas delanteras con las ventanillas cerradas. Valores en decibelios) |
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CARROCERIA ***
Aunque se mantiene la misma base que el Giulietta, en la amplitud interior se ha ganado bastante, sobre todo longitudinalmente.
El interior del 75 es amplio y estéticamente agradable. El cuadro es de diseño moderno y la lectura de los relojes se realiza sin problemas. También lleva a un lado del cuadro un ordenador de viaje de varias funciones, particularmente inútil por lo erróneo de los datos en todo lo que se refiere a consumos, velocidad media y temperatura exterior. Más a la derecha hay una serie de testigos que indican si las puertas están abiertas y toda una serie de incidencias más.
El volante es de tamaño adecuado y de tacto agradable, y los mandos de las luces y limpiaparabrisas están bien al alcance de la mano; en general, el puesto de conducción no merece ninguna crítica. No nos parece práctico el mando del freno de mano que es muy aparatoso. Eso sí, es prácticamente imposible no darse cuenta de que está puesto.

Los asientos son muy cómodos y tienen el grado de rigidez justo. En el trasero se ha pensado que normalmente solo van a ir dos ocupantes por su forma anatómica, pero, incluso si van tres, lo pueden hacer cómodamente. El espacio para las piernas es suficiente siempre y cuando los asientos delanteros no estén atrás del todo.
El maletero es de buen tamaño y su apertura se realiza desde el puesto de conductor. La rueda de repuesto está colocada en el fondo del maletero.
La climatización es buena, y opcionalmente se puede montar un equipo de aire acondicionado.
Además del completo equipamiento que tiene el coche, el acabado de los detalles es bueno y se pone casi a la altura de sus competidores franceses y alemanes.
EQUIPAMIENTO
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Cuentarrevoluciones |
SI |
Cuentakilómetros parcial |
SI |
Termómetro de agua |
SI |
Manómetro presión de aceite |
SI |
Reloj |
SI |
Ordenador de viaje |
SI |
Testigo reserva de carburante |
SI |
Testigo de freno de mano |
SI |
Testigo desgaste pastillas de freno |
SI |
Parabrisas laminado |
SI |
Faros antiniebla |
NO |
Piloto antiniebla trasero |
SI |
Aire acondicionado |
OP |
Volante regulable |
SI |
Asiento regulable en altura |
NO |
Retrovisor regulable |
SI |
Apoyacabezas delanteros |
SI |
Elevalunas eléctricos (delanteros/traseros) |
SI/NO |
Cerraduras centralizadas |
SI |
Luz lectura mapas |
SI |
Tapón carburante con llave |
SI |
Llantas aleación |
SI |
Preequipo de radio |
SI |
Asiento posterior divisible |
NO |
Opciones: Aire acondicionado: 225000 pesetas; pintura metalizada: 60000 pesetas. |
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FRENTE A SUS RIVALES
Dentro de este segmento de los familiares, los rivales más directos del Alfa 75 son: el BX Sport y el BMW 320i. Aunque en concepto están bastante próximos, lo cierto es que en precio el BMW se dispara un millón por encima de los otros dos. El Alfa tiene el comportamiento más deportivo de todos y tan solo el BX se le aproxima en eficacia. El más confortable es el BMW, quedando el Alfa en un término medio.
El Alfa nos parece la elección más razonable, ya que, además de ser el más barato, ofrece una relación eficacia-confort muy buena y es bastante más discreto que el BX, cuyas molduras plásticas lo hacen muy llamativo.
CARACTERISTICAS TECNICAS
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Motor: disposición: delantero, longitudinal. Número de cilindros: 4, en línea. Cilindrada: 1962 cc (84x88,5 mm). Cigüeñal: de 5 apoyos. Distribución: 2 árboles de levas en cabeza accionados por cadena. Alimentación: 2 carburadores dobles. Compresión: 9 a 1. Tipo de carburante: gasolina 97 octanos. Capacidad del depósito: 49 litros. Potencia máxima: 128 CV a 5400 rpm. Par máximo: 18,3 mkg a 4000 rpm.
Transmisión: tracción: a las ruedas traseras. Caja de cambio: manual de 5 marchas. Velocidad a 1000 rpm en cada marcha: 1ª: 8,8 km/h; 2ª: 14,4 km/h; 3ª: 20,7 km/h; 4ª: 26,8 km/h; 5ª: 32,8 km/h. Embrague: mando hidráulico.
Dirección: tipo: de cremallera asistida. Vueltas de volante entre topes: 3,5. Diámetro de giro: 10,9 metros.
Frenos: sistema: disco en las cuatro ruedas, servo.
Suspensiones: tipo: independiente delante, puente de Dion detrás.
Ruedas: llantas de aleación de 5,5x14 pulgadas. Neumáticos: 185/65HR14.
Peso: en orden de marcha: 1130 kg.
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· Texto: V. Piccione. Fotos: A. Puyol (MOTOR 16 nº 119, 1 de febrero de 1986)
· Gracias a Jose Fidel por enviar el reportaje