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Mercedes 180 Pontón
Hemos asistido en Alemania a la presentación oficial que la casa Mercedes-Benz ha hecho a sus representantes y Prensa de todo el mundo de sus nuevos modelos de automóviles.
Después de una recepción en la que escuchamos el interesante discurso del Dr. Fritz Könecke, presidente del Comité de Dirección de la Daimler-Benz, y de una conferencia de tipo técnico del Dr. Fritz Nallinger, ingeniero-jefe de la Mercedes, destacando las mejoras de los nuevos modelos y haciendo ver comparativamente con proyecciones las ventajas técnicas que sobre los anteriores existían, nos fueron presentados y exhibidos los nuevos coches 170 S. V., 170 S. D. y el 180, de una concepción y diseño este último que revoluciona todo lo conocido en los coches «Mercedes» y entra por la «puerta grande» en el mercado internacional del automóvil familiar de tipo medio.
Los tipos 170 S. V. y 170 S. D. son los modelos 1954 de los coches ya conocidos en el mundo entero en cuanto a su mecánica y carrocería, mejorado; en su suspensión, distribución de peso y amortiguación, que han influido muy favorablemente en pro del vehículo, dándole una mejor adaptación a la ruta. Estos coches vienen a sustituir los anteriores tipos 170 V. 170 D., 170 S. y 170 DS., superándoles en un mayor espacio interior, mayor visibilidad a través de sus ventanas, aumentando también su radio de acción a 450 kilómetros en el 170 S. V. y a 750 en el S. D.
Incluyen en su precio de serie calefacción, y se suministran con conducción interior y con conducción exterior con techo corredizo.
El nuevo 180 es un automóvil de los llamados familiar de tipo medio que entra en el mercado mundial indudablemente por la «puerta grande» para, colocarse en franca y leal competencia en primera línea entre los coches de este tipo más codiciados por el gran público.
Sólo probado el nuevo «Mercedes 180», y después de exigir de él todo aquello que se puede «pedir» a un automóvil para que, por lo menos, en algo le deje a uno defraudado, no conseguimos salimos con la nuestra, por haber tenido que comprobar que a la nueva máquina «Mercedes 180» se la puede pedir y exigir todas aquellas «cosas» y maniobras que no a todos los automóviles se le pueden hacer.
Sentados al volante del nuevo coche, empezamos comprobando que pueden verse los dos guardabarros delanteros, lo cual ya de por sí significa para cualquier conductor una ventaja considerable. Puesto el coche en marcha después de ligera presión sobre el botón de arranque, comprobamos que el aislamiento de su motor y suavidad del mismo son en realidad tan asombrosos que hacen dudar que el motor haya arrancado al primer intento. Desde el interior su visibilidad es completa: un gran parabrisas con vasto campo visual en todas las direcciones. Una gran ventana trasera y amplia visibilidad a través de sus ventanas laterales. Todos los instrumentos se encuentran al alcance visual del conductor. Desde los primeros momentos se encuentra uno al mando de un coche que le es familiar, causándole la impresión de ser mucho el tiempo que se le lleva conduciendo.
Los rendimientos de su marcha y la adherencia a la carretera son pronto comprobados y le dan la categoría de único en su género. Su aceleración es magnifica, sobre todo en su tercera velocidad. La penetración en el aire, de escasa resistencia, y su velocidad máxima, de 126 a 130 kilómetros por hora, hacen alcanzar al vehículo unas velocidades medias elevadas sin cansancio alguno. Sus frenos son potentes y bien equilibrados y su consumo de unos ocho litros por cada 100 Kilómetros.
Es un coche que se deja conducir fácilmente, y auguramos que de una gran seguridad para cualquier conductor.
El nuevo coche va dotado del Fahrschemel, que constituye una especie de cuna delantera de gran rigidez que soporta el motor, la caja de cambios, los órganos de la dirección, los amortiguadores y la suspensión de las ruedas delanteras. Este nuevo sistema forma un conjunto con el bloque motor, embrague y caja de cambios, pudiendo ser sacado todo ello cómodamente con sólo soltar tres puntos de apoyo y muy pocas tuberías. Esta nueva condición ha mejorado el tiempo necesario para sustituir algunos órganos, reduciéndolo aproximadamente a 1/3 del anterior. Este llamado Fahrschemel viene a ser una especie de bastidor en forma de U, constituido por piezas de chapa prensadas, que proporciona al automóvil un concepto de masa articulada que amortigua el traqueteo, aumentando de forma considerable las cualidades de marcha del vehículo.
En cuanto a su suspensión y adaptación a la carretera, está también favorecida por la buena relación entre el ancho de vía y la distancia entre ejes. La suspensión del coche lleva trapecios articulados en la parte delantera con un muelle helicoidal y suspensión de goma con actuación progresiva. En el centro del muelle helicoidal se encuentra el amortiguador telescópico. Una barra de torsión muy bien estudiada hace que la inclinación del vehículo en las curvas sea pequeña.
El eje trasero en forma de eje independiente lleva resorte en hélice y su construcción es muy favorable para la marcha del coche. Por carreteras malas el vehículo tiene una adherencia extraordinaria.
La dirección, de peso ligero sin y con resorte automático, lleva una desmultiplicación relativamente directa a las ruedas que son muy adherentes a la carretera. Va dotada además de un amortiguador de aquellos que eliminan todas las sacudidas. El tambor de freno cierra herméticamente contra el agua y la suciedad y es grande y de gran eficacia.
Cómodamente caben en su interior tres personas en cada asiento. Llama poderosamente la atención la nueva maleta de equipajes, no solamente por su espaciosidad, sino porque puede aprovecharse completamente, a pesar de llevar en ella la rueda de repuesto, que, por ir en posición vertical, puede sacarse fácilmente sin necesidad de retirar las maletas.
Con esto pueden darse una idea nuestros lectores de lo que es la nueva carrocería del tipo 180: seis personas cómodamente acopladas y un equipaje abundante puede transportar. No falta un gran compartimiento para guantes, la luz automática al abrir las puertas, los apoyamanos en las puertas, el clásico mando de claxon en el volante, mando que, a la vez, es indicador de direcciones de marcha, accionando luces intermitentes adelante y atrás. La palanca de cambio bajo el volante, aislada contra ruidos, está montada por el interior del tubo de la dirección. Las puertas de esta espaciosa carrocería se abren de par en par y permiten un acceso cómodo. Por las noches los faros del automóvil iluminan perfectamente el plano de ia carretera por su estudiada posición.
Y esta es a grandes rasgos la impresión que el vehículo causa al ser visto por primera vez. Técnicamente se trata de una carrocería tipo integral y unida fijamente con el bastidor por elementos de acero soldados entre el esqueleto y el revestimiento interior y exterior, formando un todo sólido y rígido que no admite vibraciones secundarias ni con grandes velocidades. Las puertas son automáticamente silenciosas en sus bisagras y cerraduras.
El coche va dotado de un sistema de ventilación-calefacción o descongelación, respectivamente; pudiendo ser tanto la cantidad de aire como la temperatura, reguladas individualmente desde un mínimo hasta un máximo. El espejo retrovisor, elegante y a tono con el interior del coche, es antideslumbrante, con lo que el nuevo «Mercedes 180» incorpora a su espaciosa y armoniosa carrocería toda serie de detalles de gusto y de utilidad que completan la atracción del comprador que, ya de por sí, verá en este nuevo coche un automóvil familiar de tipo medio que, por sí solo, atrae las miradas. · Texto: MOTOR MUNDIAL nº 115 (Marzo 1954)
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