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Talbot Tagora SX
Presentado en enero de 1981, el Talbot Tagora realizó sus primeros contactos con el público en el Salón de París de 1980, más como un objeto de curiosidad o presentación estática, que como indicador de la opinión de sus futuros compradores, ya que Talbot comprobó tras un exhaustivo estudio, que en el período que abarca desde 1976 hasta finales de 1980 en Francia, Alemania, Italia y Gran Bretaña la media de producción de los automóviles particulares de más de 1.500 c.c. había progresado y representaba un 40 por ciento del total de la producción.
Si incluimos España y Bélgica se constata que las matriculaciones de los modelos más representativos de alto de gama totalizan durante el mismo período, 1.300.000 vehículos, o sea, más del 15 por ciento del mercado total de estos países. Partiendo de estos informes Talbot concibió la comercialización del Tagora, al demostrarse que hay un mercado para los automóviles de gama alta, confortables, espaciosos, silenciosos y con un consumo controlado.
En sus previsiones y estudio de mercado, Talbot con el Tagora que compone una gama de cuatro modelos de los que se fabrican 3.200 ejemplares mensuales, concede al "SX" sólo un 20 por ciento de su producción. Evidentemente, este modelo que tiene que hacer frente a una oposición muy densa, no es el que permitiría a Talbot aumentar sensiblemente su producción, pero al menos en el plan financiero la operación es rentable, ya que los automóviles de alto de gama aportan a los constructores unos márgenes comerciales más elevados, de todos modos es un debut interesante la constitución de una gama que le hacía falta a Talbot, ya que no se trata de un nuevo modelo, sino de una nueva gama que representa actualmente el segmento superior de los Talbot en Europa.
UN COCHE DE TRES VOLÚMENES
Desde que el estudio del Tagora empezó en mayo de 1976 con el código «C-9», se proyectó un vehículo clásico y elegante. Al principio las opiniones estaban divididas entre un coche de dos volúmenes o de tres, finalmente se retuvo la segunda solución, ya que el concepto de dos volúmenes estaba más asociado en el espíritu del público a la tracción delantera y a un coche de un segmento medio. La silueta definitiva fue aprobada en abril de 1977, pero la toma de control al año siguiente de las sociedades Chrysler (iniciadora del proyecto Tagora) y Sunbeam por el grupo P.S.A. (Peugeot), engendraron algunas adaptaciones de orden técnico en este nuevo coche, empleándose sus características, su línea, habitabilidad y excelentes cualidades ruteras son sus ventajas esenciales. La importación del Tagora "SX" en nuestro país, equipado del motor de 6 cilindros en V, aparte de la versión Turbodiesel, indica que no van a comercializarse en España los Tagora 2.200 c.c. de cuatro cilindros, pues quiere darse la imagen de este modelo como un destacado tope de gama, incorporando todos los elementos opcionales entrando en franca competencia con otros prestigiosos modelos de importación, tratándose todo ello de una decisión de Talbot España que forma parte de una tendencia para poder ofrecer una gama de modelos realmente amplia cubriendo todos los segmentos en un próximo futuro.
LÍNEA PERSONAL Y ELEGANTE
En el seno del grupo P.S.A. cada una de las oficinas de estilo de Citroën, Peugeot y Talbot conservan su propia identidad; vanguardista, clásica y elegante respectivamente. En el caso del Tagora, una vez más se han evidenciado perfectamente estas delimitaciones en el diseño de la carrocería realizado por A. H. Blakeslee, de silueta viril con ángulos vivos y ciertos motivos geométricos, logrando una línea personal y elegante, constituyéndose una gran berlina clásica.
Estructuralmente, los Tagora se parecen a los Peugeot 604, con mejoras de detalle y sobre todo su carrocería es mucho más aerodinámica y de corte bastante más moderno, estando situado por sus dimensiones y peso entre el 505 y el 604, de todos modos el Tagora siendo moderno es de un clasicismo general de líneas, se ha huido del clásico frontal ligeramente en declive por uno más cuadrado, aunque bastante afilado, pues el capó desciende hasta la parte delantera de un modo bastante acusado, logrando el conjunto un aceptable coeficiente de penetración de 0,45, ayudado sin duda alguna por la gran inclinación del parabrisas. Siguiendo con la parte delantera conviene destacar los enormes faros rectangulares que enmarcan la calandra formada por una rejilla vertical cromada.
Los parachoques, tanto el delantero como el trasero, son de generosas dimensiones y además envolventes y de material elastómero capaces de soportar los pequeños impactos de la circulación urbana; el delantero en su parte inferior dispone de un spoiler y una generosa entrada de aire para poder refrigerar mejor los 6 litros de aceite del cárter motor.
Las molduras laterales paralelas situadas en el plano inferior del capó y superior de los parachoques, embellecen y protegen respectivamente al coche lateralmente, ayudando ópticamente a bajar aún más la cintura de la carrocería, por otra parte todos los junquillos son en negro mate. Donde se alojan las ruedas aparece en su contorno unos aletines que forman parte de la carrocería personalizando el vehículo estéticamente, pero que no son meramente un simple adorno, pues su eficacia la pudimos comprobar al circular un trecho por carretera mojada, observando después pocas salpicaduras en la carrocería. Las ruedas están compuestas por unas elegantes llantas de aleación ligera, formadas por cuatro brazos, de seis pulgadas de anchura equipadas con los excelentes neumáticos Michelin TRX As de 210 y perfil 65.
En la parte posterior de la carrocería los grupos ópticos de gran tamaño responden a las actuales tendencias, el enorme maletero luce en su parte derecha las siglas SX que definen el modelo de la gama, en resumen, posteriormente el Tagora conserva la misma tendencia de gran coche que todo el resto del vehículo, logrando una gran armonía de conjunto.
Una vez más encontramos en este Talbot grandes soluciones para su seguridad pasiva con una carrocería con perfiles conformados en forma de cajón mejorando la absorción de impactos por deformación progresiva, por otra parte el habitáculo constituye un auténtico «espacio de supervivencia» en caso de colisión, gracias a los robustos largueros de la parte inferior y a los arcos de seguridad que envuelven el habitáculo.
UN GRAN HABITÁCULO CON UN COMPLETO EQUIPAMIENTO
La carrocería del Tagora SX es generadora de un gran habitáculo, el cual está en todos sus detalles excelentemente terminado, sus cotas muestran con qué holgura y comodidad pueden instalarse cinco pasajeros, sin embargo, los asientos tapizados en terciopelo diseñados perfectamente para adaptarse a la anatomía del cuerpo humano, parecen estudiados sólo para cuatro personas. El volante es monobrazo de agradable tacto y ofrece una perfecta lectura del cuadro de instrumentos de equipamiento muy completo pero de concepción discutible al ser muy parecido al del Solara, teniendo en cuenta que el habitáculo de este coche es mucho más serio.
El diseño del cuadro de instrumentos es simple, dos relojes redondos dominan el conjunto, destinados al cuenta-revoluciones y cuenta-kilómetros, encuadrados a la izquierda por el termómetro de agua y presión de aceite, y a la derecha por el indicador del nivel de carburante y amperímetro, encima de este conjunto aparecen 9 testigos, completa el cuadro en su extremo izquierdo, las teclas de la luz, luneta térmica y el warning, y en el extremo derecho una central electrónica de control de gran ayuda para el conductor, integrada por una serie de indicadores que verifican, previa la marcha, el estado de sus órganos, controlándose las luces delanteras y traseras, los niveles de agua del radiador, de agua del lavacristales, del mínimo de gasolina, del mínimo de aceite y para finalizar el estado de los frenos tanto en el desgaste de pastillas como en el nivel de líquido. Al dar el contacto todos estos testigos se encienden y si todo está conforme volverán a apagarse al cabo de cinco segundos. En cualquier momento se puede realizar una comprobación simultánea con el pulsador «Test» y si algo no va bien el indicador correspondiente no se encenderá.
Siguiendo con su completo equipamiento, encontramos al lado izquierdo de la columna de dirección un mando graduado que acciona manualmente los faros y modifica su plano según la carga. Por otra parte encontramos en la consola central un teclado que acciona la aireación, ventilación, calefacción y aire acondicionado y por encima de ella el ordenador de a bordo construido actualmente por Jaeger, que permite en cualquier momento saber la hora, el tiempo invertido, la distancia recorrida, la media y el consumo total, medio o instantáneo, lo que permite levantar el pie del acelerador sin perder demasiada velocidad, bajando mucho el consumo. Evidentemente en su equipamiento no podían faltar los alza cristales eléctricos y el cierre electromagnético de las puertas, realmente sólo encontramos a faltar el radio casette, quedando a elección del gusto personal del futuro comprador.
UN EXCELENTE V-6
La mecánica del Tagora SX es sofisticada, sólo levantar el capó y aparece a nuestra vista un vano motor muy lleno en donde se halla ubicado el motor P.R.V. construido en aleación ligera de 6 cilindros en V y 2.664 c.c., de cotas totalmente supercuadradas, 88 x 73 mm., dotado de un árbol de levas en culata por cada grupo de cilindros, desarrollando la notable potencia de 165 ev. a 6.000 r.p.m., siendo de las cuatro versiones que se han realizado (Peugeot, Renault, Volvo y Talbot) la más potenciada gracias a una serie de modificaciones en las culatas y al montaje de 2 carburadores Weber de triple cuerpo, en vez de la inyección, que quedan ocultos a la vista por sus enormes filtros, logrando el par motor máximo de 23,4 mKg. a un régimen bastante elevado de 4.200 r.p.m.
La caja de cambios de cinco marchas y la transmisión son de origen Peugeot, en cuanto a las suspensiones descubrimos igualmente que provienen del 505 y 604, conservando su sistema de cuatro ruedas independientes, de todos modos los técnicos de Talbot al recibir estos últimos componentes también los evolucionaron a su estilo, realizando una profunda transformación en el tren trasero para mejorar su rigidez, modificando a su vez el nivel de los reglajes con ángulos de caída negativa en ambos trenes, unido a diferentes tarados de muelles y amortiguadores, mejorando ostensiblemente el comportamiento rutero, pero produciendo un ligero endurecimiento de la suspensión que queda compensado por el excelente diseño de sus asientos; por otra parte conviene constatar que la larga distancia entre ejes y el aumento de los anchos de vía determinan un amplio cuadrilátero de apoyo en beneficio de la seguridad.
Por último, no quisiéramos pasar por alto que el Tagora SX es la única versión de este modelo que dispone de cuatro frenos de disco estando ventilados los delanteros, mientras que las otras versiones equipan un sistema mixto de disco-tambor.
UN EXTRAORDINARIO RUTERO
Así que entramos en el habitáculo para efectuar la prueba por carretera, nos encontramos con un interior muy claro y una excelente visibilidad panorámica, debido a su enorme superficie acristalada. La posición de conducción está bien estudiada, pero los conductores de piernas largas agradecerían una columna de dirección regulable, aunque se pueda ajustar el asiento en altura, al quedar el espacio entre el volante y el asiento corto. Al poner el motor en marcha, después de apagarse la central electrónica de control, surge el clásico susurro del V6, una vez en marcha apreciamos la sensibilidad de la dirección asistida la cual no conviene manejar bruscamente al ser muy directa. El embrague y el cambio de marchas, son extraordinarios, con una buena progresión en su recorrido y una excelente selección y sincronizado en el cambio. Mientras circulamos por autopista la conducción del Tagora transmite un enorme placer y un gran confort, habiéndose conseguido una excelente insonorización del habitáculo, tanto del motor como de los ruidos de la carrocería, ya que en ésta todas las uniones se realizan a través de elementos elásticos que filtran ruidos y vibraciones hasta conseguir un perfecto aislamiento.
En cuanto circulamos por una carretera general, la suspensión más dura que en los Peugeot asegura una característica del Tagora, su buen comportamiento rutero. Sí, es cierto, la suspensión es más firme pero sin ser desagradable, la amortiguación es buena para las grandes ondulaciones y lógicamente más seca en los pequeños desniveles, especialmente si se pasan a poca velocidad al adoptar las ruedas unos ángulos de caída negativa, quedando los pasajeros muy bien amortiguados por la calidad de los asientos. Todo ello redunda en beneficio de una excelente estabilidad tanto en seco como en mojado, completando esta acción la dirección asistida muy precisa y su gran maniobrabilidad en un coche de estas dimensiones y peso, así como el extraordinario resultado de los frenos, consiguiéndose unas distancias de frenado relativamente cortas, dando la posibilidad de realizar fuertes promedios sin esfuerzo.
El motor aunque dispone de 165 CV no los aparenta, y si queremos realizar arrancadas enérgicas hay que subir el motor de vueltas, pues por debajo de 2.500 r.p.m. no hay respuesta, esto se debe al régimen máximo del par motor situado a 4.200 r.p.m., sin embargo, a partir de las 2.500 hasta las 6.000 r.p.m. el motor es un "tiro", lástima que el desarrollo del cambio sea tan largo para la conducción deportiva, de todos modos para el usuario normal le permite hacer cruceros de 160 km/h., tranquilamente sin ninguna rumorosidad del motor.
Las cifras alcanzadas en las prestaciones son muy brillantes y posiblemente se puedan mejorar con un vehículo más rodado, pero son muy significativos los 9" 8/10 de 0 a 100 km/h. y los 15" 9/10 en los 400 metros salida parada, mientras que en el kilómetro salida parada rebajamos la cifra mágica de los 30" quedando en 29" 8/10; en esta última medición utilizamos sólo las cuatro primeras marchas, en cuanto a la velocidad máxima alcanzamos los 187,796 km/h. a 5.300 r.p.m. En cuanto al consumo, no se puede pretender en un coche de estas prestaciones y cubicaje, que gaste poco, sin embargo, durante la prueba mostró un gasto bastante contenido, de 9,52 litros a 100 km/h. y de 11,06 a 120 km/h., disparándose su consumo en ciudad.
En resumen, un vehículo muy interesante dentro de la categoría de grandes coches y ello por un precio bastante controlado, de unos 2.274.000 de pesetas en carretera, incluyendo todos los extras posibles. Con la llegada del Tagora SX el grupo P.S.A. posee la gama media alta europea más extensa configurada por berlinas clásicas.
FICHA TÉCNICA TALBOT TAGORA SX
Motor Posición: Delantero longitudinal vertical. Número de cilindros: 6 en V a 90°. Diámetro por carrera: 88,0 x 73,0 mm. Cilindrada: 2.664 c.c. Relación de compresión: 9,5 : 1. Potencia máxima DIN: 165 CV a 6.000 r.p.m. Par motor máximo DIN: 23,4 mKg. a 4.200 r.p.m. Material del bloque: Aluminio, con camisas húmedas recambiables. Material de la culata: Aluminio. Cigüeñal: Sobre cuatro apoyos. Distribución: Un árbol de levas en cada culata mandados por cadena. Posición de las válvulas: En V en la cámara hemisférica. Accionamiento válvulas: Por doble hilera de balancines en cada culata. Lubricación: Bomba de engranajes. Refrigeración: Por líquido. Ventilación: Correa trapezoidal con embrague. Alimentación motor: Bomba mecánica. Carburadores: Dos Weber 40 IT verticales de triple cuerpo. Encendido: Electrónico sin contactos.
Transmisión Tracción: Trasera. Embrague: Monodisco en seco, de diafragma, 230 mm. de diámetro. Cambio de marchas: 5 marchas de avance todas sincronizadas. Primera: 3,863:1. Segunda: 2,183:1. Tercera: 1,445:1. Cuarta: 1,000:1.,Quinta: 0,844:1. Tipo grupo: Cónico hipoide, reducción 3,889:1 (9/35).
Suspensión Delantera: Ruedas independientes tipo MacPherson, muelles helicoidales, amortiguadores hidráulicos telescópicos y estabilizadora. Trasera: Ruedas independientes tiradas por mediación de brazos triangulares con eje de oscilaciones oblicuo, muelles helicoidales, amortiguadores hidráulicos telescópicos y estabilizadora.
Dirección Tipo: Cremallera. Diámetro de giro: 10,6 m. Arbol de dirección: Articulado con dos juntas. Vueltas volante de tope a tope: 3,25 vueltas. Servo: Sí. Diámetro externo volante: 38 cm.
Frenos Tipo de circuito: Independiente por cada tren. Asistencia: Servo de 9 pulgadas. Delanteros: De disco ventilados, de 273 mm. diámetro. Traseros: De disco, de 273 mm; de diámetro,.
Ruedas Diámetro de llanta: 14 pulgadas. Anchura de llanta: 6 pulgadas: Neumáticos: Michelin TRX AS. Medida: 210/65 HR-365.
Equipo electrónico Tensión: 12 voltios. Generador: Alternador Sankyo de 1.050 vatios y 75 amperios. Batería: Tudor 225 A de 45 Amperios hora. Faros: Rectangulares Marchal de 38 cm x 16mm.
Carrocería Estructura: Monocasco autoportante. Tipo: Berlina. Número de puertas: Cuatro. Asientos delanteros: Dos butacas. Asientos traseros: Todo corrido con descansa brazos central. Peso en vacío: 1.345 kilogramos.
Capacidades Depósito de combustible: 70 litros. Aceite motor: 6 litros. Circuito. refrigeración: 10 litros. Caja de cambios: 1,85 litros. Capacidad maletero: 630 dm3 .
Prestaciones De 0 a 100 km/h.: 9" 8/10. De 0 a 120 km/h.: 14"0/00. 400 metros con salida parada: 15"9/10. 1.000 metros con salida parada: 29"8/10. Velocidad máxima: 187,796 km/h. a 5.320 r.p.m.
Consumo Ciudad: 17,22 litros. A 100 km/h.: 9,52 litros. A 120 km/h.: 11,06 litros. · Texto: Mario Chavalera (AUTOMOVIL Nº 49, Febrero de 1982)
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