No lo ponen fácil para nada. Hay que rascarse el bolsillo pero bien. Si te acercas en coche por no vivir en plena capital, si vas con dos o tres aficionados que rondan los diez años, si te tomas algo en plena visita para descansar un poco las piernas... te pones en 80 euros a poco que te descuides. Me estoy enfriando un poco. Tampoco sabes exactamente que vas a ver. Si hubiera Bugatti en cantidad, si hubiera una buena colección de Pegaso, si se reuniera un equipo de Alpine para celebrar el modelo que está a punto de salir al mercado me animaría más.
Vamos a ver que tal tiempo hace y también que les apetece a mis muchachos. Esto de hacer de padre y de instructor de los críos de otros es, a veces, muy complicado.