que en paz descanse, un político de raza y amante apasionado del Citroën CX
En una entrevista realizada por una revista, Jean-Claude Laumond, ex chófer de Jacques Chirac, relataba lo siguiente: “...en uno de los numerosos viajes entre París y La Corrèze (550 km de curvas en 3h 30min), el capitán de la Gendarmería Local telefoneó a Bernardette Chirac, que ya se encontraba en el destino y le dijo << señora, el radar ha detectado el coche de su marido circulando a 182 km/h. Estará ahí en un cuarto de hora>> A la llegada, ella le preguntó si habíamos corrido y Chirac lo negaba diciendo << claro que no, claro que no>>. La verdad es que sí, tanto en autopistas como en nacionales, circulábamos a 200-210 km/h. La suspensión de mi querido y añorado Citroën CX Prestige permitía dormir a Chirac mientras viajábamos a ese ritmo, por lo que no apreciaba que íbamos tan rápido. El Renault 25 ya no fue tan cómodo y estable y el Safrane es un cacharro difícil de manejar por encima de los 150 km/h...