Esto es como las subastas de arte. Llega un tipo, paga 49 millones de dólares por un cuadro de unas flores y automáticamente pintor y cuadro alcanzan las cotas de la leyenda.
Pero en realidad ni Van Gogh era un genio (nada que ver con Velázquez, por supuesto) ni el cuadro Los Lirios era (es) nada del otro mundo, sin contar con que Van Gogh pintó unos cuantos cuadros de lirios, no solo ese. Estaba obsesionado con los putos lirios. Ni siquiera era un ejemplar único en su temática, al igual que El Grito de Munch, del cual hay varias versiones, o La Virgen de las Rocas de Da Vinci, que se copió a sí mismo ya en el siglo XV.
Si Alan Bond no hubiera pagado ese dineral por un cuadro por lo demás bastante insulso, Van Gogh seguiría siendo lo que era hasta 1987, un pintor cotizado en el mercado pero no en el limbo de los grandes. Todavía me sigo preguntando por qué este señor pagó ese dineral por ese cuadro. Quizá tenía más vangoghs y quiso aumentar el valor de todos ellos pagando una monstruosidad por ese; es la única explicación racional que se me ocurre.
Pues con los coches pasa igual. Llega un tipo a una subasta, paga un pastón por un coche y automáticamente todos los coches de ese modelo pasan a valer una pastizara. Así de fácil y sin ninguna explicación lógica.
Ya veréis el dia que se subaste un ciervo por 18 millones de libras. Ja! Luego que me vengan los anti-British con sus filípicas.
Regz