Recientemente he presenciado los tejemanejes de un rodaje cinematográfico, y veo que este tipo de "deslices" o simplemente falta de atención escrupulosa a la época, en el aspecto del parque móvil, es bastante común. Imagino que depende del presupuesto, de la cantidad de cosas a las que atender a la vez...
Sin embargo, recalco: para mí, menos justificable que la aparición de un 127 metalizado o un 124 Pamplona (por lo arriba comentado) es que el guión haga hincapié en que un Seat 850 con apenas 4 años (según modelo y matrícula) fuera considerado en 1973 como un "trasto viejo", y que su dueño se empeñase en cambiarlo, sí o sí.
Y, por desgracia, ayer ya aparecía el coche con problemas, y unas sonoras detonaciones, como para reforzar la tesis de Antonio Alcántara.
No cabe duda de que el hombre puede haberse encaprichado de un 124, pero para darle un poco más de verosimilitud, en casa le deberían recordar que su coche solamente tiene 4 años, pienso yo.