En aquellos años no era infrecuente el que el propietario de un A lo "pasara" estéticamente a B a fin de modernizarlo, siendo lo más habitual añadirle los cromados laterales, el faro central en la parrilla con los bigotes horizontales, el escudo alado de SEAT en el frontal del capot, los aros con "visera" para los faros y, ya puestos, pintarlo en los dos colores que eran opcionales en el B pero que, sobre todo al principio de los mismos, eran lo más frecuente.
Había sin embargo otras cosas del B que con frecuencia no se "ponían" al A modernizado que eran el depósito de gasolina distinto y con orificio llenado lateral y la rueda de repuesto hoprizontal sobre el mismo así como, prácticamente nunca, el cristal trasero panorámico porque eso exigía de un trabajo especializado y costoso.
En principio, si estas transformaciones se hicieron en esos años, aunque alteran la autenticidad del coche, tienen interés histórico por lo que suponen como reflejo de una época. Lo que deesde luego no tiene sentido es hacerlo ahora, sobre todo poniendo colores distintos en lugares en los que no corresponde, como en el capot, pero la inexplicable manía en gastar dinero para hacer falso lo auténtico es una rara costumbre nacional, y ahí están la multitud de falsos FL y FU a partir de auténticos 124 & 1430.
El problema está en qué hacer cuando uno se encuentra con uno de estos coches modificados en su época, en especial cuando volverlo a su autenticidad es más difícil y costoso que arreglarlo tal cual está. Lo que desde luego no tiene sentido es decir que es "auténtico", y lo que procede es explicar honestamente lo que es el coche, y como ejemplo adjunto las fotos de un A "pasado" a B incluso en el depósito de gasolina pero, como es líogico, no en el cristal trasero. Restaurarlo tal cual está me perece correcto, pero sin explicar películas sino diciendo claramente que es un A al que se le pudieron elementos del B.