Igual llevais razón;yo es que estoy algo viejo y me he vuelto muy cobarde, pero hay gente gracias a dios más lanzada e ilusionada en restauraciones laboriosas.
A veces he visto vender cosas para mí incomprensibles...y otras veces lo que para mí es un caramelo no se vende.
Como dice el refrán , para gustos hay colores.
Un saludo.
PD: también influye la cartera de cada uno , en mi caso de poca potencia ultimamente.