Mis primeras experiencias al volante fueron cuando tenía 12 años, a los mandos de una Renault 4F como la de la imagen, con mi padre en el asiento del copiloto.
Era en una zona recién urbanizada, todavía sin construir. El primer día consistió en practicar el arranque en 1ª, circular en línea recta y parar; en fines de semana posteriores ya aprendí a circular unos 300m con cambio hasta 3ª velocidad y luego hacíamos un circuito un poco más largo. Recuerdo que tenía que mirar por el hueco entre el salpicadero y la parte superior del volante, dada mi pequeña estatura.
Luego, hasta que que me saqué el carnet ya conducía con cierta regularidad los coches de casa -R4, R12- (con mi padre al lado hasta los 16 y luego incluso solo hasta los 18).
en 1981, unos meses antes de tener los 18, hice las prácticas obligatorias (10) en un Renault 5 como este:
Aprobé el teórico con 17 y justo unos días después de cumplir los 18 me examiné del práctico (y suspendí!!!); menuda vergüenza al llegar a casa suspenso...
Fui de sobrado y fallé en la maniobra de dar marcha atrás en curva pegado a un bordillo; me acuerdo que bajé a la ventanilla y con todo el desparpajo de un conductor experimentado le espeté al examinador: "no se preocupe, me he despistado, pero ahora lo vuelvo a hacer perfecto". Se medio sonrió y me dijo: "sí, pero ya lo dejamos para la semana que viene; salga del circuito y deje el coche al siguiente".
Evidentemente, eran otros tiempos...